Salud mental y nómina: la fuga de capital más subestimada en las empresas mexicana

En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, nuevos estudios evidencian una alerta clave para las empresas, donde el agotamiento y la falta de salud mental en los colaboradores representan uno de los costos más altos y menos reconocidos en la nómina. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, a escala global, la depresión y la ansiedad provocan la pérdida de 12,000 millones de días laborales cada año, con un costo cercano a 1 billón de dólares en productividad.

El impacto del agotamiento laboral se refleja directamente en ausentismo, rotación y baja productividad. En México, el ausentismo sigue dominado por causas físicas como enfermedades respiratorias, infecciosas, lumbalgia, tendinitis, etc. (+65%). Sin embargo, las bajas documentadas por salud mental han incrementado de menos del 20% en 2018 hasta cerca del 30% en 2024. Aunque se estima que siguen siendo subreportadas, es a partir de la implementación de la NOM-035 que se ha acelerado la documentación de la salud mental como motivo de baja.

Salud mental: un tema financiero, no solo humano

Sofía, la empresa de seguros médicos empresariales completos, reportó en su estudio, “El despertar de la salud empresarial en México”, una paradoja: aunque los líderes reconocen que el bienestar es clave para la retención del talento, todavía enfrentan importantes barreras para actuar. El 80% considera el costo un freno, el 64% cree que no podrá medir el retorno de inversión (ROI) y el 31% teme la complejidad administrativa.

Frente a este panorama, Sofía propone un modelo que cambia las reglas del bienestar empresarial para incluir salud mental. “En Sofía, el objetivo es desestigmatizar el acceso a la atención psicológica, reforzando que el bienestar emocional no debe ser reactivo, sino preventivo y cotidiano”, explica Sebastián Jiménez-Bonnet, CPO de Sofía.

La competitividad, la retención de talento y el crecimiento ya no se sostienen sin el bienestar real de los equipos. En el marco de la Semana Mundial del Bienestar en el Trabajo, el mensaje para la alta dirección es uno: los indicadores de negocio deben incluir métricas humanas. El estrés, el sueño, la alimentación y el apoyo que la gente siente deben estar en el tablero de decisiones, junto a las finanzas y las operaciones.

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