Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos 2024
La inocuidad de los alimentos salva vidas. No sólo es un componente crucial de la seguridad alimentaria, sino que también desempeña un papel fundamental para reducir las enfermedades transmitidas por los alimentos. Cada año, 600 millones de personas enferman debido a alrededor de 200 tipos diferentes de enfermedades de transmisión alimentaria.
La carga de estas enfermedades recae muy especialmente en las personas pobres y los jóvenes. Además, las enfermedades de transmisión alimentaria provocan en torno a 420,000 muertes evitables cada año.
Este 2024, bajo el lema Inocuidad de los alimentos: preparémonos para lo imprevisto, el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos ofrece una ocasión importante para:
- Concienciar a la población sobre los problemas relacionados con la inocuidad alimentaria
- Demostrar cómo se pueden prevenir enfermedades a través de la inocuidad de los alimentos
- Estudiar enfoques colaborativos para mejorar la inocuidad alimentaria en todos los sectores
- Promover soluciones y formas de mejorar la inocuidad de los alimentos.
Cada 7 de junio recordamos que esta cuestión es una responsabilidad colectiva en la que todos deben desempeñar su papel, desde los productores hasta los consumidores. Solo así podemos estar seguros de que los alimentos que llegan al plato serán inocuos. Sin embargo, se dan situaciones excepcionales en las que, aunque todos hayamos cumplido nuestra parte, suceden imprevistos que comprometen la inocuidad de los alimentos.
Aun así, siempre hay algo que podemos hacer para evitar enfermedades. ¿Está usted preparado para lo imprevisto? Los incidentes relacionados con la inocuidad de los alimentos pueden abarcar desde sucesos menores hasta grandes crisis internacionales, ya se trate de un corte eléctrico en casa, una intoxicación alimentaria en un restaurante local, una retirada voluntaria de productos contaminados por parte de un fabricante, un brote generado por productos importados o un desastre natural. Los peligros para la inocuidad alimentaria no conocen fronteras. Por tanto, dada la creciente interconexión del suministro mundial alimentario, los riesgos que plantean los alimentos insalubres pueden escalar rápidamente de un problema local a una emergencia de alcance internacional.
Los gobiernos pueden:
- comprometerse a elaborar o actualizar planes nacionales de intervención en situaciones de emergencia relativas a la inocuidad de los alimentos.
- reforzar los sistemas nacionales de control de los alimentos.
- incrementar la capacidad de vigilancia y coordinación.
- mejorar la comunicación con las empresas alimentarias y el público en general.
Las empresas alimentarias pueden:
- compartir entre ellas las «enseñanzas extraídas» y trabajar de forma colaborativa.
- mejorar la forma de comunicarse con los consumidores.
Los consumidores pueden:
- asegurarse de saber cómo notificar un incidente relacionado con la inocuidad de los alimentos, o cómo responder a él.
- asegurarse de conocer las repercusiones de un imprevisto que suceda en casa, y de saber reaccionar a él.