Importancia de la salud y nutrición de los trabajadores
La fuerza de trabajo en las Américas representa cerca del 50% (460 millones) de la población total de la región, siendo su principal fuente de producción y desarrollo. América Latina y el Caribe contribuyen con 60% de la fuerza de trabajo y está presente en todos los sectores económicos. Sin embargo, para asegurar su máximo rendimiento y productividad se necesitan: condiciones de trabajo seguras, saludables y satisfactorias; y, condiciones de empleo equitativas y justas. Solo así se logrará el trabajo decente, que contribuya al desarrollo y la productividad individual, sectorial y regional. Por el contrario, las condiciones de trabajo inseguras, insatisfactorias o peligrosas pueden causar accidentes, enfermedades y muertes en el trabajo. De esta manera el trabajo y el empleo se reconocen como determinantes sociales claves de la salud.
Los riesgos para la salud en el lugar de trabajo, incluidos el calor, el ruido, el polvo, los productos químicos peligrosos, las máquinas inseguras y el estrés psicosocial provocan enfermedades ocupacionales y pueden agravar otros problemas de salud. Las condiciones de empleo, la ocupación y la posición en la jerarquía del lugar de trabajo también afectan a la salud. Las personas que trabajan bajo presión o en condiciones de empleo precarias son propensas a fumar más, realizar menos actividad física y tener una dieta poco saludable.
Además de la atención sanitaria general, todos los trabajadores, y particularmente los de profesiones de alto riesgo, necesitan servicios de salud que evalúen y reduzcan la exposición a riesgos ocupacionales, así como servicios de vigilancia médica para la detección precoz de enfermedades y traumatismos ocupacionales y relacionados con el trabajo.
Las enfermedades respiratorias crónicas, los trastornos del aparato locomotor, las pérdidas de audición provocadas por el ruido y los problemas de la piel son las enfermedades ocupacionales más comunes.
Importancia de la nutrición laboral
La buena alimentación es un factor determinante para mejorar la salud y lograr prevenir muchas enfermedades crónicas. Controlar la nutrición en el ámbito laboral contribuye a mantener y mejorar el rendimiento profesional. Además, el lugar habitual de trabajo constituye un emplazamiento lógico y adecuado para la formación en materia de alimentación.
Por ello, el servicio de comedor es una de las cinco prestaciones laborales más preciadas por los empleados y es de los principales atractivos que considera un candidato para aceptar una oferta laboral. En México, especialistas indican que sólo 27% de las compañías otorgan esta prestación, el más oneroso para éstas después del salario, aunque los resultados a mediano y largo plazo son la reducción en los gastos de salud. De ahí la importancia de contar con un comedor. La OIT señala que ésta es para muchos empleados la única oportunidad que tienen al día de alimentarse sanamente y en condiciones idóneas.
En condiciones idóneas la nutrición saludable es un auténtico remedio contra el estrés y la ansiedad creados en este entorno. Las pausas para comer son periodos de descanso y ayudan a fomentar los vínculos con compañeros de trabajo y liberar tensiones. Diversos estudios han constatado que las deficiencias nutricionales son más habituales entre la población activa que debe almorzar en su lugar de trabajo.
Fuente: Organización Panamericana de la Salud (OPS)